Por Roberto Cadagán Delgado
Con el orgullo y la responsabilidad de ser la emisora más antigua de la Región de Los Ríos, Radio Concordia de La Unión asume el desafío de informar y entretener a sus auditores. Una tarea donde todo el equipo tiene algo que aportar.
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— ¡Shhhhhhhh! ¡Cáyense niños!… ¡Dejen escuchar los muertos!
¿Escuchar los muertos? Rosita y Nacho se miraron extrañados.
Como siempre, el abuelo Octavio escucha desde muy temprano Radio Concordia de La Unión, pero nunca hace callar a los niños, aunque a veces armen el tremendo desorden en la casa.
Es más, en ocasiones, el abuelo tiene encendido el televisor y la radio al mismo tiempo a todo volumen… Es que, aunque él no quiera reconocerlo, cada vez está más sordo. Por eso insiste en elevar el sonido de la antigua radio-cassette IRT que ocupa un lugar destacado en la cocina.
A la hora de almuerzo en esta casa de La Unión, es sagrado sintonizar las ondas de amplitud modulada de la radio para escuchar las noticias y también el informativo funerario de la Concordia, donde todos los días se informa de aquellos unioninos que han dejado este mundo.
— Mami, ¿por qué el Tata nos hace callar siempre a esta hora?, preguntó Rosita con su inocencia de cinco años …
La mamá miró a la pequeña y le explicó.
— Lo que sucede es que en la radio dan a conocer los nombres de las personas que han fallecido en las últimas horas …
— Ahhh, pero ¿todos los días mueren personas? ¿el Tata los conoce a todos?
— No a todos —, responde la madre —, pero muchos de los que están falleciendo de viejitos él los conocía. Su generación se está muriendo y él los conoció cuando era joven.
Rosita vio que su abuelo se ponía una mano en la oreja derecha como si de esa forma escuchara mejor y se quedó en silencio mientras el viejo ponía todos sus sentidos en ese antiguo aparato.
— Damos inicio a un nuevo servicio funerario en Radio Concordia de La Unión … —, se escucha la voz del locutor, Sergio Florín, en el aparato.
Los niños siguen en silencio, en la casa sólo se oye el agua hirviendo en las teteras sobre la cocina a leña.
Don Octavio pone atención a la radio, como si esa fuera su única misión del día, como si fuera un mandato, un compromiso escrito.
El sonido AM transporta al siglo pasado. No es limpio, suena como si estuviera dentro de una caja … muy lejos de la alta fidelidad y calidad de la tecnología moderna. La música de fondo del espacio radial es de tono solemne y respetuoso, generalmente con piezas clásicas o religiosas que acompañan la información sobre los fallecimientos. El sonido del piano interpretando una pieza del compositor Johann Sebastian Bach antecede la información preparada para la ocasión.
— Estamos presentando a través de Radio Concordia de La Unión, el servicio funerario de nuestra emisora, por encargo de Funeraria Gerardo Asenjo …
A veces ese piano se alarga más de lo esperado y eso pone ansioso a don Octavio.
— ¡Pucha que se alarga la cuestión!, ¡ya poh! ¿quién se murió? —, refunfuña mientras le da las últimas cucharadas a la cazuela que fue su almuerzo …
Lo que no sabe don Octavio es que al otro lado de las ondas radiales y en un estudio que no puede ver, Sergio Florín está afanado recibiendo los últimos mensajes de las funerarias de la ciudad, textos de agradecimientos, información de misas de recuerdo, etcétera.
Recibe los papeles, los ordena, trata de descifrar la letra de quien los escribió para no cometer errores. También le da una ojeada al WhatApp, por si acaso ha llegado algún otro mensajito por ahí.
— No faltan … siempre tiene que llegar alguno a última hora, señala Florín apurado y de inmediato va al aire … sus fieles radioescuchas están esperando la información.
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Faltan 20 minutos para las 8 de la mañana y Juan Guzmán camina a paso rápido hacia los estudios de radio Concordia, ubicados a una cuadra y media de la plaza de La Unión. El antiguo caserón de calle Arturo Prat es la casa de esta emisora, la más antigua de la Región de Los Ríos, fundada un 5 de mayo de 1957.
Guzmán saca sus llaves, abre las puertas exteriores e interiores. Afuera del recinto la ciudad ya está en funcionamiento en una helada mañana de invierno, no llueve, pero la neblina inunda todos los espacios dándole un toque aún más frío a esta jornada.
Mira a un costado, luego al otro. No faltan las personas que lo saludan al pasar rumbo a su trabajo. Una mano levantada, un ¡Wena Gato! (así le dicen sus amigos a Juan) se deja oír. Al ingresar a la sala de controles echa a andar todos los equipos y minutos antes de las ocho de la mañana, Radio Concordia inicia una nueva jornada.
Radio Concordia de La Unión inicia sus transmisiones correspondientes al día de hoy en el que cumpliremos con una jornada al servicio de la comunidad, entregándoles una programación ágil, amena, con música del agrado de nuestros auditores; además de noticias, comentarios y teniéndoles así bien informados… Desde este momento, Radio Concordia de La Unión está a sus gratas órdenes …
Acomodado en su silla, rodeado de equipos, perillas, botones, micrófonos y pantallas de computadores, Guzmán pasará las siguientes horas en contacto con toda la comuna, la región, Chile y el mundo a través de la magia de las ondas radiales.
Los recuerdos, el matinal De todo un Poco, la Discoteca Mexicana, saludos, mensajes, el informativo 82 y el servicio necrológico son algunos de los programas que llegarán a los hogares urbanos y rurales de la comuna de La Unión.
Porque no hay unionino que no haya escuchado la Radio Concordia. No hay nadie de esta comuna que alguna vez no haya seguido las voces de Juan Guzmán, Sergio Florín, Sixto Reyes y de algunos que ya no están como César Figueroa u Oscar “Pirincho” Salazar, con la recordada Fiesta en su Casa, o la inconfundible Olga Gatica, quien hoy pasa sus días en una casa de acogida en Puerto Montt con un vago recuerdo de lo que fue su vida radial, las campañas solidarias que emprendió, los miles de noticiarios que encabezó y las horas y horas de matinal que entregó a la comunidad de su querida ciudad.
— De una u otra forma esas voces son parte de los hogares de esta comuna —, reflexiona Florín.
Comercial Vientos del Sur les ofrece a los criadores, veterinarios, a los jinetes, lo mejor para la salud y rendimiento de sus caballos. Además, vende alimentos para animales mayores. Y el alimento forrajero de invierno que se llama Biolax …
Florín siente que esta antigua emisora es un patrimonio que se debe mantener en la historia, aunque hacer radio cada día sea más complejo. Así lo cree también Miryam Figueroa, actual gerente de la radio, quien casi por una obligación familiar debió hacerse cargo de los destinos de la empresa, tras el fallecimiento de su padre César y su hermana Elda.
— Esta misión radial iba a quedar sí o sí en alguien de la familia. Y bueno, me tocó a mí nomás …—, dice con algo de resignación en su amplia oficina.
Allí los recuerdos se agolpan en las paredes.
Se puede ver fotos donde aparece César Figueroa con destacadas autoridades, presidentes, alcaldes, pero también se ven momentos felices compartidos con los colaboradores, quizás en algún día de la radio donde al calor de una comida y buenos vinos se reafirmó una y otra vez el compromiso férreo con esta emisora.
En uno de los estudios de la radio, Sergio Florín cuenta que también es un fanático coleccionista y aficionado a la historia. Así comparte antecedentes claves de esta emisora que se mantiene en pie en el dial 820 de la Amplitud Modulada.
Cuenta que Radio Concordia de La Unión tiene 67 años de existencia. Comenzó sus emisiones con un transmisor artesanal de 500 watts, bajo la dirección de Manuel Rojas Leyton. Sus propietarios eran los empresarios valdivianos Armando Alid y Rogelio Gómez Carpio.
A lo largo de los años ha crecido tanto en potencia como en influencia en la Región de Los Ríos. A medida que pasó el tiempo, bajo la dirección de César Figueroa, la radio se consolidó y conformó la Sociedad Radiodifusora Concordia Limitada. La emisora amplió sus transmisiones y mejoró su equipo técnico para brindar mejor cobertura. Figueroa, nacido en 1922, tuvo una carrera variada que lo llevó desde el sector ferroviario hasta la radiodifusión, siendo un pionero en este campo y muy reconocido por la comunidad local, que lo vio ya bien entrado en años, con el mismo entusiasmo de joven y con una grabadora bajo el brazo en búsqueda de la noticia, y del comentario de las autoridades sobre la actualidad nacional y local.
Radio Concordia ha sido clave para mantener a la comunidad informada y entretenida. A lo largo de su historia, ha transmitido programas culturales, musicales y de servicio. También ha sido una plataforma importante para el fomento de la música tradicional chilena, especialmente en programas como La Discoteca Mexicana y Chile y su Música. A raíz de esto La Sociedad Chilena de Autores e Intérpretes Musicales destacó a nivel nacional el trabajo realizado por la radio por su compromiso con la difusión de la música chilena durante el año 2023.
Florín se hace un tiempo en su apretada agenda para sumar detalles a la historia de esta emisora y eso vaya que es un privilegio, porque siempre anda como si estuviera apurado, con pasos cortos y rápidos, como si tuviera cosas por hacer, como si lo estuvieran esperando para darle la última noticia… pareciera que nunca está tranquilo.
Gracias a su buena disposición, destaca que la emisora ha mantenido su relevancia a lo largo de los años a pesar de los cambios tecnológicos y el avance de otros medios. Radio Concordia sigue siendo un símbolo de la cultura local de La Unión y una fuente de identidad para sus habitantes.
En sus inicios la radio partió en un modesto estudio ubicado en calle Manuel Montt, más tarde se trasladó a un gran estudio en calle Esmeralda, con salón auditórium incluido, donde hacían galas de sus habilidades, los niños, jóvenes y adultos, artistas unioninos aficionados.
En el año 1969 la radio se instala a su actual ubicación de calle Arturo Prat 464. Desde aquí, ha continuado con su innegable labor informativa, recreativa y social, en bien de la comunidad, contando con miles de fieles auditores de campo y ciudad, que la sintonizan día a día, haciendo de Radio Concordia de La Unión su mejor compañía.
Sergio Florín, es profesor y bombero. Es una figura reconocida en la comunidad principalmente por su labor radial y su inconfundible voz en las locuciones comerciales.
Su trayectoria lo llevó a ser reconocido como Hijo Ilustre de La Unión en 2023, donde se ha desarrollado toda su vida. Pero, lo más importante, es que se siente absolutamente contento feliz y espera no defraudar a nadie y poder seguir apoyando.
— Sobre todo desde el tema de las comunicaciones que es lo que la gente más nota de toda mi trayectoria pr
ofesional —, dice.
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Ríase del frío y de la lluvia protegiéndose con ropa adecuada a la estación que Casa Masri tiene para usted. Este invierno no sentirá el paso de los días helados vistiendo un chaquetón, un abrigo, un tapado de Casa Masri … 65 años de prestigio y tradición presente en cada hogar de La Unión y de la zona.
La casa donde se encuentra la Radio Concordia cruje con cada pisada. Sus tablas de añosas maderas han resistido el paso del tiempo. Como toda casona antigua guarda recuerdos que no volverán. En sus paredes hay fotografías de visitas de autoridades como los presidentes Aylwin, Lagos, Bachelet, Piñera; alcaldes como Enrique Larre, Werner Grob, René Tribiño, Elfrida Ojeda y tantas otras autoridades de todos los colores, que saben que cuando hay que comunicar algo el paso por el estudio de la Radio Concordia es obligatorio.
Los años pasan, la historia continúa.
En Óptica Central recuerde que hacen los lentes como a usted le gusta que le hagan. Lentes, a la pinta suya como se dice, porque tenemos todo lo que se necesita para hacer un precioso par de lentes.
— Un saludo para nuestra querida amiga Rosita. Sí, ella es una fiel auditora y nos llama desde la Población Santa Mónica. Un cariñoso saludo de esta radio —, transmite al aire Juan Guzmán, mientras conduce su programa de los recuerdos en la jornada matinal. Ello, mientras, aprieta perillas, sube y baja unas teclas; y con el mouse dispone la siguiente canción de su programa.
Juan Guzmán se mantiene bien físicamente a sus recientemente 71 años cumplidos. Se mueve rápido, está atento a todo lo que significa estar al aire en una radio. Si no fuera por su cabellera con canas y algunas arrugas en su rostro, nadie diría que está en las siete décadas. Valdiviano de nacimiento, pero unionino por adopción, aprendió este oficio de manera autodidacta, mirando, preguntando y finalmente, jugándosela cuando tuvo su oportunidad. Hoy es la voz radial cuando hay algún evento deportivo y su estilo rápido y ágil es inconfundible transmitiendo desde el estadio Carlos Vogel.
De pronto, entra la secretaria Karin Salazar Mora, le pasa un papelito con un mensaje. Otro papelito que se sumará a la decena que tiene acumulados por todas partes en su lugar de trabajo. Por los pasillos de la emisora pasa rauda Patricia Aguilar Obando. Locutora y reportera que desde temprano va en busca de las noticias que protagonizarán el informativo.
Parece que aquí todos corren.
— Así nomás … Hay que ser rápido para estar atento a todas las cosas. No te voy a decir que no me costó al principio y al final uno de acostumbra —, dice Guzmán en forma rápida, mientras trabaja.
— ¿Toda una vida en la radio? —, le pregunto.
— Esta es como mi casa … esta es mi vida.
— Repuestos y accesorios San Sebastián de Saturnino Quezada en Prat con Angamos 296 les espera con un gran surtido de ampolletas de 12 y 24 watts, fusibles, cables eléctricos en todas sus medidas. Además, don Saturnino Quezada agradece a Dios por darle vida y salud para seguir apoyando por más de 8 años a gente de las zonas rurales y urbanas”.
Para llegar a la planta baja de la radio se debe descender por una escalera caracol.
De pronto, el aire se torna húmedo y más frío. Las paredes de este subsuelo tienen antiguas imágenes de cantantes que ya tuvieron su tiempo de fama: Gervasio, Fresia Soto, Luis Dimas, Danny Chilean … También hay equipos antiguos, parlantes, micrófonos en desuso. El polvo se ha encargado de cubrirlos, pero son testigos de una época donde hacer radio era distinto … sin celulares, ni internet.
Acá abajo está la discoteca de la emisora. Miles y miles de discos de vinilo, de todos los tamaños, de todos los géneros musicales. Una infinidad de temas nacionales y extranjeros, en español e inglés, en otras lenguas, con canciones de artistas que pasaron al olvido y otros que son parte de la cultura popular como Julio Iglesias, Carlos Gardel, Facundo Cabral.
Sergio Florín se maneja a sus anchas. Dice que este material está obsoleto y que es parte de la radio, pero bien podría estar en un museo.
— Ni sé cuántos discos hay, también cassettes y cedés. Uf … Hace poco los ordenaron, pero ya no se usan.
— ¿Los conoce todos?
— No, pero sí la mayoría.
— A ver, pongámoslo a prueba … Muéstreme un disco del Monte aguilino …
— Ah, ese está en música nacional, folclor … Por aquí está. — Un disco de Celia Cruz …
— Internacional, salsa … aquí. Un poco apretado donde está, pero sí, lo tenemos.
— Algo de reggaetón …
— No poh, de eso no tenemos aquí. Esto es parte de la radio. Uf, imagínate más de 50 años … Eso no lo tiene cualquiera y para mí, junto con un orgullo, es hacer historia.
— Recuerde que los mejores juguetes usted los encuentra en Comercial Cosmos. Su negocio ahí muy cerca de usted. Recuerde que al momento de comprar un regalo perfecto Comercial Cosmos lo espera en calle Comercio de La Unión.
Amante de las rancheras y a cargo de un programa dedicado especialmente a este ritmo, el locutor Sixto Reyes, ingresa cada mañana a los hogares de La Unión.
Reconoce 63 años y un espíritu jovial que es envidiable. Su carácter amable es la clave de su éxito como locutor en la radio, esa es la razón por la cual decenas de auditoras y auditores se comunican con él todos los días mientras conduce su programa en los estudios de la emisora.
— Mira, muchas personas pasan por un momento difícil y llaman a la radio. Les digo que deben buscar el lado positivo y seguir adelante nomás —, comenta Reyes.
Ese espíritu joven, alegre, positivo y entusiasta identifican a este locutor y por eso su espacio radial recibe decenas de llamados al día.
Con sólo 18 años, Sixto Reyes, entró a trabajar como junior en la Radio Concordia. Se define como rápido para aprender.
— Comencé desde abajo, haciendo lo más básico, pero después me dieron la oportunidad de radiocontrolar un programa —, relata.
Mientras de fondo se escucha un tema de los famosísimos Charros de Lumaco cuenta que la radio ha sido su segunda casa. Llega aquí y está en su ambiente … es feliz.
— Es impagable hacer lo que a uno le gusta. Me siento querido por los unioninos y estaré aquí hasta que Dios quiera—, dice.
Señores auditores, hoy hemos cumplido una jornada más de labor durante la cual todos nuestros esfuerzos han sido dirigidos a llevarles sano esparcimiento, informaciones y consejos útiles que les hagan más atractiva la actividad diaria para bien de ustedes, la familia y la patria.
Por la deferencia que nos han otorgado en este día y los venideros les quedamos altamente agradecidos.
Son las 17 horas y Radio Concordia cierra sus transmisiones hasta el inicio de un nuevo día de servicio a La Unión, Chile y el mundo.
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